también como Nava, después le cambiaron el nombre para ponerle otro más
técnico, Poljé de la Nava.
El origen de esta llanura es el hundimiento del terreno debido a la acción erosiva del agua sobre la roca caliza, que ha originado una abrupta depresión cerrada de fondo llano con suelos de tierra roja (terra rossa), suelo de color rojizo producto de la degradación de las calizas por meteorización. Se trata de un suelo arcilloso, impermeable en cuanto alcanza un cierto nivel de hidratación. Su coloración se debe a la precipitación de óxido férrico. Este fenómeno se desarrolló en el pasado bajo condiciones climáticas más cálidas y húmedas que las actuales. Se trata por lo tanto de un Paleosuelo.
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Expectacular nevada
Aunque se le conoce como la Nava de Cabra, el 75% de toda esta llanura
pertenece al termino municipal de Zuheros.
Durante el recorrido por la extensa llanura aparecen, montículos de piedra de grandes dimensiones, conocidos como "hum", son elementos que han sufrido de forma diferencial la acción erosiva de la lluvia. En ellos se pueden encontrar algunos fósiles como los ammonítes.
Los abundantes rebaños de ovejas que cotidianamente surcan este valle, son los encargados de alimentarse de sus ricos pastos.
Al fondo el Picacho, donde se encuentra el Santuario de Ntra. Sra. de la Sierra ( 1217m.), abajo la Nava, con algunas zonas encharcadas por un buen año de precipitaciones.
También es conocido como el Balcón de Andalucía, ya que desde él podemos contemplar las tres grandes unidades geológicas de nuestra comunidad Sierra Morena, la Depresión del Guadalguivir y la Cordillera Bética.
El Río Bailón, nace en la Nava
La Nava sirve de enorme cuna, para el río Bailón, que nace del agua recogida por las cumbres que rodean el poljé, y que se acumulan en él. Este agua no puede infiltrarse a través de las arcillas impermeables, por lo que divaga a través de la llanura, en busca de una salida.
Majuelo en flor
Bosque de quejigos, en este paraje podemos contemplar ejemplares centenarios
de una enorme belleza, en esta zona es donde se recogen las precipitaciones más abundantes de toda la comarca.
El río Bailón atravesando el camino por el que nos lleva a las Majadas
Bonita imagen del río Bailón
En primavera después de un invierno lluvioso, el mosáico botánico de este paraje nos dejará sorprendidos.
Un manto de un geranio silvestre (Erodim recoderi)
Otra bella planta que nace en la Nava, jacinto estrellado (scilla pearuvian)
Dos endemísmos del sur de España, arriba un narciso amarillo conocido como la flor de San José (Narcissus bugei) y abajo (Biarum carratracense), de la familia de los aros, conocida como dragoneta o dragonera.
Hay un pequeño romance fechado en 1613, del poeta cordobés Luis de Gongora dedicado a Doña Elvira Fernández de Córdoba, hija del VI Señor de Zuheros, que hace referencia a Zuheros y la Nava:
"¡ cuantos silvos, cuantas voces
la Nava oyó de Zuheros
sentidas bien de sus valles,
guardadas mal de sus ecos!
vaqueros las dan, buscando
la hermosa por lo menos
cerrera, luciente hija
del toro que pisa el cielo."
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